Biblia Total


Lucas 17 - Biblia Martin Nieto


Ocasiones de caer

1 Después dijo a sus discípulos: "Es inevitable que haya escándalos; pero ¡ay de aquel que los provoca!

2 Más le valdría que le ataran al cuello una piedra de molino y lo tiraran al mar antes que escandalizar a uno de estos pequeñuelos.

3 Tened cuidado".

4 Y si peca contra ti siete veces al día y otras tantas se acerca a ti diciendo: Me arrepiento, perdónalo".

Auméntanos la fe

5 Los apóstoles le dijeron: "Acrecienta nuestra fe".

6 Y el Señor dijo: "Si tuvierais una fe tan grande como un grano de mostaza y dijerais a este sicómoro: Arráncate y trasplántate al mar, él os obedecería".

El deber del siervo

7 "¿Quién de vosotros, que tenga un criado arando o pastoreando, le dice cuando llega del campo: Pronto, ven y siéntate a la mesa?

8 Más bien le dirá: Prepárame de cenar, y ponte a servirme hasta que yo coma y beba. Después comerás y beberás tú.

9 ¿Tendría que estar agradecido al criado porque hizo lo que se le había ordenado?

10 Así también vosotros, cuando hayáis hecho lo que se os haya ordenado, decid: Somos siervos inútiles; hemos hecho lo que debíamos hacer".

Diez leprosos son limpiados

11 Yendo Jesús camino de Jerusalén, pasó por entre Samaría y Galilea.

12 Al entrar en una aldea, salieron diez leprosos a su encuentro, que se detuvieron a distancia

13 y se pusieron a gritar: "Jesús, maestro, ten compasión de nosotros".

14 Al verlos, les dijo: "Id a presentaros a los sacerdotes". Y mientras iban, quedaron limpios.

15 Uno de ellos, al verse curado, volvió alabando a Dios en voz alta

16 y se echó a los pies de Jesús, dándole gracias. Éste era samaritano.

17 Jesús dijo: "¿No han quedado limpios los diez? ¿Dónde están los otros nueve?

18 ¿No hubo quien volviera a dar gracias a Dios, sino este extranjero?".

19 Y le dijo: "Levántate, anda; tu fe te ha salvado".

La venida del Reino

20 Los fariseos le preguntaron cuándo iba a llegar el reino de Dios. Él respondió: "La llegada del reino de Dios no será espectacular.

21 No se dirá: Está aquí o allí, porque el reino de Dios está dentro de vosotros".

22 Y dijo a sus discípulos: "Tiempo vendrá en que desearéis ver uno de los días del hijo del hombre y no lo veréis.

23 Y os dirán: Miradlo allí, o miradlo aquí. No vayáis, ni corráis.

24 Porque de la misma manera que el relámpago brilla desde un punto a otro del cielo, así será cuando venga el hijo del hombre en su día.

25 Pero antes es preciso que sufra mucho y que sea rechazado por esta generación.

26 Como sucedió en los días de Noé, así será en los días del hijo del hombre.

27 Comían, bebían y se casaban ellos y ellas, hasta que Noé entró en el arca, vino el diluvio y acabó con todos.

28 Lo mismo que sucedió en los días de Lot: Comían, bebían, compraban, vendían, plantaban, edificaban;

29 pero el día en que Lot salió de Sodoma llovió fuego y azufre del cielo y acabó con todos.

30 Así sucederá el día en que el hijo del hombre se manifieste.

31 Aquel día, el que esté en la terraza y tenga en la casa sus enseres, que no baje a recogerlos; el que esté en el campo, que no vuelva atrás a buscar nada.

32 Acordaos de la mujer de Lot.

33 El que intente salvar su vida la perderá, y el que la pierda la encontrará.

34 Os digo que en aquella noche dos estarán juntos en una mesa; a uno se lo llevarán, y a otro lo dejarán.

35 Estarán dos mujeres moliendo juntas, a una se la llevarán y a otra la dejarán".

36 Y le preguntaron: "¿Dónde será, Señor?".

37 Él contestó: "Donde esté el cuerpo, allí se reunirán los buitres".