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2 Reyes 19:35 Biblia Reina Valera 1960 | 61 Versiones de la Biblia Comparar

2 Reyes 19

35 Y aconteció que aquella misma noche salió el ángel de Jehová, y mató en el campamento de los asirios a ciento ochenta y cinco mil; y cuando se levantaron por la mañana, he aquí que todo era cuerpos de muertos.

2 Reyes 19

35 Aquella misma noche salió el ángel del Señor e hirió en el campamento asirio a ciento ochenta y cinco mil hombres. Por la mañana, al despertar, los encontraron ya cadáveres.

2 Reyes 19

35 Aconteció que aquella misma noche salió el ángel del SEÑOR e hirió a 185,000 en el campamento de los Asirios. Cuando los demás se levantaron por la mañana, vieron que todos eran cadáveres.

2 Reyes 19

35 Esa misma noche salió el ángel de Yavé y dio muerte en el campamento de los asirios a ciento ochenta y cinco mil hombres. ¡A la mañana siguiente, a la hora de levantarse, sólo había cadáveres, estaban todos muertos!

2 Reyes 19

35 Aconteció que aquella misma noche salió el ángel de Jehová y mató en el campamento de los asirios a ciento ochenta y cinco mil hombres. A la hora de levantarse por la mañana, todo era cuerpos de muertos.

2 Reyes 19

35 Aquella misma noche salió el ángel de Yahveh y mató en el campamento de los asirios a ciento ochenta y cinco mil hombres. Cuando se levantaron por la ma ana, vieron que no hab a más que cadáveres.

2 Reyes 19

35 Esa misma noche el ángel del Señor salió y mató a ciento ochenta y cinco mil hombres del campamento asirio. A la mañana siguiente, cuando los demás se levantaron, ¡allí estaban tendidos todos los cadáveres!

2 Reyes 19

35 Aquella misma noche salió un mensajero de Yahweh e hirió a 185,000 en el campamento de los aramitas, y a la mañana siguiente ya todos eran cadáveres.

2 Reyes 19

35 Aquella misma noche salió el Angel de Adonai e hirió en el campamento asirio a 185.000 hombres; a la hora de despertarse, por la mañana, no había más que cadáveres.

2 Reyes 19

35 Aquella misma noche el Ángel de Yahvé avanzó y golpeó en el campamento asirio a ciento ochenta y cinco mil hombres; al amanecer eran todos cadáveres.