Biblias Múltiples



Romanos 7:4 Biblia Reina Valera 1960 | 71 Versiones de la Biblia Comparar

Romanos 7

4 Así también vosotros, hermanos míos, habéis muerto a la ley mediante el cuerpo de Cristo, para que seáis de otro, del que resucitó de los muertos, a fin de que llevemos fruto para Dios.

Romanos 7

4 Así también vosotros mis hermanos, habéis muerto a la ley por el cuerpo de Cristo; para que seáis de otro, de Aquél que resucitó de entre los muertos, a fin de que llevemos fruto para Dios.

Romanos 7

4 Así también ustedes, hermanos míos, por medio del cuerpo de Cristo han muerto a la ley, para pertenecer a otro, al que resucitó de los muertos, a fin de que demos fruto para Dios.

Romanos 7

4 Así pues, hermanos míos, también vosotros quedasteis muertos respecto de la ley por el cuerpo de Cristo, para pertenecer a otro: a aquel que fue resucitado de entre los muertos, a fin de que fructificáramos para Dios.

Romanos 7

4 Así pues, hermanos míos, también vosotros quedasteis muertos respecto de la ley por el cuerpo de Cristo, para pertenecer a otro: a aquel que resucitó de entre los muertos, a fin de que diéramos frutos para Dios.

Romanos 7

4 Así pues, hermanos míos, también vosotros quedasteis muertos respecto de la ley por el cuerpo de Mesias, para pertenecer a otro: a aquel que fue resucitado de entre los muertos, a fin de que fructificáramos para Di-s.

Romanos 7

4 De manera semejante, hermanos míos, ustedes también han muerto para efectos de la ley en el cuerpo del Mashíaj, para que ahora se unan a otro, al que resucitó de entre los muertos, a fin de que produzcan fruto para Elohim.

Romanos 7

4 Así mismo, hermanos míos, vosotros moristeis a la ley mediante el cuerpo crucificado de Cristo, a fin de pertenecer al que fue levantado de entre los muertos. De este modo daremos fruto para Dios.

Romanos 7

4 Así también vosotros, hermanos míos, habéis muerto a la ley mediante el cuerpo de Cristo, para que seáis de otro, del que resucitó de los muertos, a fin de que llevemos fruto para Dios.

Romanos 7

4 Así también vosotros, hermanos míos, habéis muerto a la Ley mediante el cuerpo de Cristo, para que seáis de otro, del que resucitó de entre los muertos, a fin de que llevemos fruto para Dios.