1 Tesalonicenses 2:5-7

5 Como sabéis, nunca hemos recurrido a las adulaciones ni a las excusas para obtener dinero; Dios es testigo.

6 Tampoco hemos buscado honores de nadie; ni de vosotros ni de otros.

7 Aunque como apóstoles de Cristo hubiéramos podido ser exigentes con vosotros, os tratamos con delicadeza. Como una madre que amamanta y cuida a sus hijos,