1 Reyes 22:34-36

34 Entonces un hombre disparó su arco al azar e hirió al rey de Israel por entre las placas de la coraza, y el rey dijo a su auriga: "Da la vuelta a los caballos y sácame de la batalla, porque me siento mal."

35 Aquel día el combate se prolongó y el rey hubo de ser sostenido en pie en su carro frente a los arameos, hasta que murió al atardecer; la sangre de la herida corría por el fondo del carro.

36 Al caer el sol corrió un grito por el campamento: "Cada uno a su ciudad, cada uno a su herencia.