Lamentaciones 1:16-18

16 Por eso estoy llorando; mi ojo, mi ojo se va en agua, pues no hay quien me consuele, quien me devuelva el ánimo. Mis hijos están desolados, porque ha ganado el enemigo. Pe.

17 Tiende Sión sus manos: ¡no hay quien la consuele! Ha mandado Yahvé contra Jacob sus adversarios por doquier; se ha convertido Jerusalén en algo impuro entre ellos. Sade.

18 Justo, justo ha sido Yahvé, pues he sido indócil a sus órdenes. Escuchad, pueblos todos, contemplad mi dolor. Mis doncellas y mis jóvenes han marchado al cautiverio. Qof.