Cantares 1:6-8

6 No se fijen en mi tez morena, el sol me ha bronceado: mis hermanos se enojaron conmigo: me pusieron a guardar las viñas; ¡y mi propia viña no la guardé!

7 III. El pastor inaccesible Dime, amado mío, dónde pastoreas, dónde recuestas tu rebaño al mediodía, para que no vaya como una prostituta tras los rebaños de tus compañeros.

8 Si no lo sabes por ti misma, la más bella de las mujeres, sigue las huellas del rebaño, y lleva a pastar tus cabritillas junto a las chozas de los pastores.