Hechos 2:3-5

3 Aparecieron lenguas como de fuego, que descendieron por separado sobre cada uno de ellos.

4 Se llenaron todos de Espíritu Santo y empezaron a hablar en lenguas extranjeras, según el Espíritu les permitía expresarse.

5 Residían entonces en Jerusalén judíos piadosos, venidos de todos los países del mundo.