Salmos 1:1-3

1 Jr 17,5-8; Prov 4,10-19 Dichoso quien no acude a la reunión de los malvados ni se detiene en el camino de los pecadores ni se sienta en la sesión de los arrogantes;

2 sino que su tarea es la ley del Señor y susurra esa ley día y noche.

3 Será como un árbol plantado junto al río, que da fruto a su tiempo, su fronda no se marchita; en todo lo que hace, prospera.