Eclesiastés 1:11-13

11 No queda memoria de lo que precedió, ni tampoco de lo que ha de suceder quedará memoria en los que vengan después.

12 Yo, el Predicador, fui rey sobre Israel en Jerusalén.

13 Me entregué de corazón a inquirir y a buscar con sabiduría sobre todo lo que se hace debajo del cielo; este penoso trabajo dio Dios a los hijos de los hombres para que se ocupen en él.