Hebreos 1:11-13

11 Ellos perecerán, mas tú permaneces. Todos ellos se envejecerán como una vestidura;

12 como un vestido los envolverás, y serán mudados. Pero tú eres el mismo, y tus años no acabarán».

13 ¿A cuál de los ángeles dijo Dios jamás: «Siéntate a mi diestra, hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies»?