1 Samuel 25:24-26

24 Luego, echándose a sus pies, exclamó: "¡Que la culpa, oh se or, caiga sobre m ! Pero permite que tu sierva hable en tu presencia y d gnate escuchar las palabras de tu sierva.

25 Que mi se or no preste atención a un hombre perverso como Nabal, porque él es lo que su nombre significa: se llama Nabal y es realmente un insensato. Pero yo, tu sierva, no vi a los jóvenes que tú, mi se or, enviaste.

26 Ahora, mi se or, por la vida de Yahveh y por la tuya, por Yahveh, que te ha impedido derramar sangre y hacerte justicia por tu propia mano, que tus enemigos y cuantos intentan el mal contra mi se or sean como Nabal.