Biblia Total


Salmos 32 - Biblia Castilian 2003


La dicha del perdón Salmo de David. Masquil.

1 De David. Maskil Dichoso el perdonado de la culpa, al que han sido cubiertos los pecados;

2 dichoso el hombre al que el Se or no culpa de maldad, que no tiene en su esp ritu fals a.

3 Mientras quise callar, mis huesos se gastaban en llanto todo el d a;

4 mientras tuve tu mano pesando d a y noche sobre m, mi humor se consum a en ardores de verano. Selah

5 Te confesé mis faltas y no encubr mis culpas, pensando: "Confesaré mis yerros al Se or", y tú me perdonaste el mal de mi pecado. Selah

6 Por eso todo justo ha de implorarte en la hora de la angustia; y al irrumpir las aguas caudalosas, a él no llegarán.

7 Tú eres mi refugio: me libras del pesar y me ci es del gozo del rescate. Selah

8 Yo voy a hacerte ver, a ense arte el camino que has de seguir; yo quiero aconsejarte, mis ojos sobre ti.

9 No seáis como el caballo y el mulo que carece de sentido, cuyo br o hay que domar con mordaza y con freno, y si no, no se te acerca.

10 Muchos son los dolores del imp o, mal al que f a en el Se or la gracia le circunda.

11 Gozaos en Yahveh y alegraos, los justos, cantad todos de júbilo, rectos de corazón.