Santiago 1:15-17

15 Después, la concupiscencia, cuando ha concebido, da a luz el pecado, y éste, una vez consumado, engendra la muerte.

16 No os engañéis, hermanos míos queridísimos.

17 Toda dádiva generosa y todo don perfecto vienen de lo alto y descienden del Padre de las luces, en quien no hay cambio ni sombra de mudanza.