Lucas 8:47-49

47 La mujer, al verse descubierta, se presentó temblando y se echó a los pies de Jesús. Después contó delante de todos por qué lo había tocado y cómo había quedado instantáneamente sana.

48 Jesús le dijo: "Hija, tu fe te ha salvado; vete en paz.

49 Estaba aún Jesús hablando, cuando alguien vino a decir al dirigente de la sinagoga: "Tu hija ha muerto; no tienes por qué molestar más al Maestro.