Habacuc 1:12-14

12 Oh SEÑOR, mi Dios, Santo mío, tú que eres eterno, ¡no puede ser que estés planeando acabar con nosotros! Oh SEÑOR, nuestra Roca, tú has enviado a los babilonios para corregirnos y castigarnos por nuestros muchos pecados.

13 Pero tú eres puro y no soportas ver la maldad. ¿Serás indiferente ante la traición de ellos? ¿Guardarás silencio mientras los perversos se tragan a gente más justa que ellos?

14 ¿Somos tan sólo peces para ser capturados y matados? ¿Somos simples criaturas del mar que no tienen quien las guíe?