Hebreos 1:7-9

7 Pero con respecto a los ángeles, Dios dice: «Él envía a sus ángeles como los vientos y a sus sirvientes como llamas de fuego»*.

8 Pero al Hijo le dice: «Tu trono, oh Dios, permanece por siempre y para siempre. Tú gobiernas con cetro de justicia.

9 Amas la justicia y odias la maldad. Por eso oh Dios —tu Dios —te ha ungido derramando el aceite de alegría sobre ti más que sobre cualquier otro»*.