Malaquías 1:3-5

3 pero rechacé a su hermano, Esaú, y devasté su zona montañosa. Convertí la herencia de Esaú en un desierto para chacales».

4 Los descendientes de Esaú en Edom podrán decir: «Hemos sido destrozados, pero reconstruiremos las ruinas». No obstante, el SEÑOR de los Ejércitos Celestiales responde: «Puede ser que intenten reconstruirlas, pero yo las derribaré de nuevo. Su país será conocido como “tierra de perversidad” y su pueblo será llamado “el pueblo con quien el SEÑOR está para siempre enojado”.

5 Cuando vean la destrucción con sus propios ojos, dirán: “¡Verdaderamente la grandeza del SEÑOR se extiende más allá de las fronteras de Israel!”».