Cantares 1:4-6

4 ¡Hazme del todo tuya![4] ¡Date prisa! ¡Llévame, oh rey, a tu alcoba! Regocijémonos y deleitémonos juntos, celebraremos tus caricias más que el vino. ¡Sobran las razones para amarte! Morena soy, pero hermosa, hijas de Jerusalén; morena como las carpas de Cedar, hermosa como los pabellones de Salmá.[5]

5 (OMITTED TEXT)

6 No se fijen en mi tez morena, ni en que el sol me bronceó la piel. Mis hermanos se enfadaron contra mí, y me obligaron a cuidar las viñas; ¡y mi propia viña descuidé!