Judas 1:14-16

14 Son olas de un mar embravecido, que arroja la espuma de sus propias desvergüenzas; estrellas fugaces, cuyo eterno destino es la tiniebla sin fondo.

15 A ellos se refería Henoc, el séptimo patriarca después de Adán, cuando profetizó: "Mirad, viene el Señor con sus innumerables ángeles.

16 Viene para desenmascarar a los malvados por todas las acciones criminales que han cometido, para tapar la boca a los impíos que han hablado contra él con insolencia."