1 Reyes 1:12-14

12 Así es que ahora ven, por favor, déjame aconsejarte solemnemente. Y provee escape para tu propia alma y para el alma de tu hijo Salomón.

13 Ve y entra a donde el rey David, y tienes que decirle: ‘¿Acaso tú, mi señor el rey, no fuiste quien juró a tu esclava, diciendo: “Salomón tu hijo es el que llegará a ser rey después de mí, y él es el que se sentará sobre mi trono”? ¿Por qué, pues, ha llegado a ser rey Adonías?’.

14 ¡Mira! Mientras tú estés todavía hablando allí con el rey, entonces yo mismo entraré después de ti, y ciertamente confirmaré tus palabras”.