2 Corintios 1:9-11

9 De hecho, sentimos en nosotros mismos que habíamos recibido la sentencia de muerte. Esto fue para que no tuviéramos nuestra confianza en nosotros mismos, sino en el Dios que levanta a los muertos.

10 De tan grande cosa como la muerte nos libró y nos librará; y en él está puesta nuestra esperanza de que también nos seguirá librando.

11 Ustedes también pueden coadyuvar con su ruego por nosotros, a fin de que por muchos se den gracias a favor nuestro por lo que se nos da bondadosamente debido a muchos rostros [vueltos hacia arriba en oración].