Mateo 6:21-23

21 porque donde está tu tesoro allí estará también tu corazón (Le. 12:34).

22 La lámpara del cuerpo es el ojo. Si, pues, tu ojo fuere sano, todo tu cuerpo será luminoso:

23 mas si tu ojo fuere malo todo tu cuerpo será tenebroso. Si, pues, la luz que en tí hay, son tinieblas, ¡cuan grandes las tinieblas!