Marcos 1:32-34

32 Al atardecer, al ponerse el sol, trajeron a Él a todos los que estaban enfermos y a los oprimidos por espíritus malignos.

33 Y toda la ciudad estaba congregada a la puerta.

34 Y a muchos que estaban enfermos de diversas enfermedades los sanó, y expulsó a muchos esíritus malignos, y no dejaba que los espíritus malignos hablaran, porque lo conocían.