Romanos 1:27-29

27 y así también los hombres, dejando el uso natural de las mujeres, se encendieron en sus concupiscencias los unos con los otros, cometiendo cosas nefandas hombres con hombres, recibiendo en sí mismos la recompensa que convino a su extravío.

28 Y como no les pareció retener a Dios en su conocimiento, Dios los entregó a una mente reprobada, para hacer lo que no conviene;

29 estando atestados de toda iniquidad, de fornicación, de malicia, de avaricia, de maldad; llenos de envidias, de homicidios, de contiendas, de engaños, de malignidades;