Hebreos 1:2-4

2 Ahora, en esta etapa final, nos ha hablado por un Hijo, al que nombró heredero de todo, lo mismo que por él había creado los mundos y las edades.

3 EL es reflejo de su gloria, impronta de su ser; él sostiene el universo con la palabra potente de Dios; y después de realizar la purificación de los pecados, se sentó a la derecha de su Majestad en las alturas,

4 haciéndose tanto más poderoso valedor que los ángeles cuanto más extraordinario es el título que ha heredado.