Marcos 2:26-28

26 Entró en la casa de Dios, en tiempos del sumo sacerdote Abiatar, comió de los panes dedicados, que nada más que a los sacerdotes les está permitido comer, y les dio también a sus compañeros.

27 Y añadió: El sábado existió por el hombre y no el hombre por el sábado:

28 de modo que el hombre es señor incluso del sábado.