Hebreos 1:4-6

4 El Hijo de Dios llegó a ser superior a los ángeles, pues Dios le dio un nombre mucho más importante que el de ellos.

5 Porque nunca Dios le dijo a ningún ángel: «Tú eres mi Hijo; desde hoy soy tu padre.» Tampoco dijo de ningún ángel: «Yo seré para él como un padre, y él será para mí como un Hijo.»

6 Y cuando Dios envió a su Hijo a este mundo, ordenó: «Que todos mis ángeles lo adoren.»