2 Pedro 3:6-8

6 Por eso el mundo de entonces fue destruido por una inundación.

7 Pero esa misma palabra ha reservado los cielos y la tierra que ahora existen; los ha guardado para el fuego en el día del juicio y de la destrucción de los hombres perversos.

8 Pero no olviden, amados hermanos, que para el Señor un día es como mil años, y mil años como un día.