Biblia Total


2 Crónicas 32 - Biblia Versión Israelita Nazarena 2011


Senaquerib invade a Judá

1 Después de estas obras fieles, Sanjeriv, Sanjeriv, el rey de Ashur; invadió a Yahudah y acampó contra sus ciudades fortificadas, con la intención de conquistarlas.

2 Cuando Yejizqiyahu vio que había venido Sanjeriv, con intenciones de combatir contra Yerushalem,

3 consultó con sus oficiales y sus guerreros para cegar los manantiales de agua que estaban fuera de la ciudad; y ellos lo apoyaron.

4 Se reunió una gran tropa para cegar todos los manantiales y el arroyo que corría a través del territorio, porque de otra manera, pensaron ellos, el rey de Ashur vendría y hallaría agua en abundancia.

5 Él actuó con vigor, reconstruyendo toda la muralla agrietada, levantando torres en ella, y edificando otra muralla por fuera. Fortificó la Ciudadela de la Ciudad de Dawid, e hizo una gran cantidad de lanzas y escudos.

6 Designó oficiales de batalla sobre el pueblo; luego los hizo reunir ante él en la plaza de la puerta de la ciudad, y les habló al corazón diciendo:

7 “Sean fuertes y de buen ánimo; no teman ni desmayen ante el rey de Ashur, ni ante la multitud que viene con él, porque con nosotros hay más que los que están con él.

8 Con él está un brazo de carne, pero con nosotros está Yahweh nuestro Elohim, para ayudarnos y para pelear nuestras batallas”. El pueblo se animó por el discurso de Yejizqiyahu, rey de Yahudah.

9 Después de esto Sanjeriv, rey de Ashur –que estaba con todo su personal en Lakish– envió sus oficiales a Yerushalem con este mensaje para Yejizqiyahu, rey de Yahudah, y para todos los de Yahudah que estaban en Yerushalem:

10 “Así ha dicho Sanjeriv, rey de Ashur: ¿En qué confían ustedes que los capacite para aguantar un cerco en Yerushalem?

11 Yejizqiyahu los está seduciendo para una muerte de hambre y de sed, cuando les dice: ‘Yahweh nuestro Elohim nos salvará del rey de Ashur’?

12 ¿Pero no fue Yejizqiyahu el que quitó sus lugares altos y sus altares y le ordenó al pueblo de Yahudah y a Yerushalem: ‘Delante de este único altar se postrarán ustedes, y sobre él harán sus ofrendas quemadas’?

13 Seguramente ustedes saben lo que mis padres y yo hemos hecho a todos los pueblos de las tierras? ¿Pudieron las deidades de las naciones de aquellas tierras librar sus tierras de mí?

14 ¿Cuál de todas las deidades de aquellas naciones que mis padres destruyeron pudo salvar a su pueblo de mí, para que la deidad de ustedes pueda librarlos de mí?

15 Ahora pues, no dejen que Yejizqiyahu los engañe; no dejen que los seduzca de esa manera; no le crean. Porque ninguna deidad de ninguna nación ni reino ha podido librar a su pueblo de mí ni de mis padres – ¡cuánto menos podrá su elohim librarlos de mí!”

16 Sus oficiales hablaron aún más cosas contra Yahweh ha"Elohim y contra su siervo Yejizqiyahu.

17 Además, escribió cartas en las que insultaba a Yahweh el Elohim de Yisrael, y le decía: “Como las deidades de las naciones de la tierra no pudieron librar a sus pueblos de mí, tampoco la deidad de Yejizqiyahu librará a su pueblo de mi mano”.

18 Le gritaron a gran voz en el idioma de Yahudah al pueblo de Yerushalem que estaba sobre la muralla, para asustarlos y hacerlos caer en pánico, para capturar la ciudad.

19 Hablaron del Elohim de Yerushalem como si fuera igual que las deidades de los demás pueblos de la tierra, hechas por manos humanas.

Jehová libra a Ezequías

20 El rey Yejizqiyahu y el profeta Yeshayahu hijo de Amots oraron acerca de esto y clamaron al cielo.

21 Yahweh envió un mensajero que aniquiló a todos los guerreros diestros, a los comandantes, y a los oficiales en el ejército del rey de Ashur, y éste regresó a su tierra avergonzado. Entró en la casa de su deidad, y allí algunos de su propio linaje lo derribaron a espada.

22 Así libró Yahweh a Yejizqiyahu y a los habitantes de Yerushalem de las manos de Sanjeriv, rey de Ashur, y de todos; él proveyó para ellos por todas partes.

23 Muchos traían a Yerushalem tributos para Yahweh, y regalos para Yejizqiyahu, rey de Yahudah; después de esto se engrandeció a los ojos de todas las naciones.

Enfermedad de Ezequías

24 En aquel tiempo, Yejizqiyahu cayó enfermo de muerte. Le oró a Yahweh, quien le respondió y le dio una señal.

25 Yejizqiyahu no correspondió por lo que se le había otorgado, porque se puso arrogante; de manera que se decretó ira contra él, y contra Yahudah y Yerushalem.

26 Entonces Yejizqiyahu se humilló en lo que se había mostrado arrogante, junto con los habitantes de Yerushalem, y ninguna ira de Yahweh vino sobre ellos durante el reinado de Yejizqiyahu.

Ezequías recibe a los enviados de Babilonia

27 Yejizqiyahu disfrutó de riquezas y gloria en abundancia; llenó sus tesorerías de plata y oro, piedras preciosas, especias, escudos y toda clase de objetos valiosos;

28 y depósitos para los productos del grano, del vino nuevo y del aceite, establos para toda clase de ganado y rediles para los rebaños.

29 Y adquirió pueblos, rebaños de ganado mayor y menor en gran abundancia, porque Elohim le otorgó muchísimas posesiones.

30 Fue Yejizqiyahu quien cegó la salida de las aguas de Guijón Alto, y las condujo hacia abajo, hacia el oeste de la Ciudad de Dawid; Yejizqiyahu prosperó en todo lo que hizo.

31 Así también en el asunto de los embajadores de los príncipes de Bavel, que fueron enviados a él para investigar la señal que había ocurrido en el país, cuando ha"Elohim lo abandonó para probarlo, para conocer todo lo que había en su mente.

Muerte de Ezequías

32 Los demás eventos del reinado de Yejizqi-yahu, y sus actos fieles, están registrados en la visión del profeta Yeshayahu hijo de Amots y en el libro de los reyes de Yahudah y de Yisrael.

33 Yejizqiyahu se durmió con sus padres, y lo sepultaron en la parte de arriba de las tumbas de los hijos de Dawid. Cuando murió, todo Yahudah y los habitantes de Yerushalem le rindieron muchos honores. Su hijo Menasheh le sucedió en el reino.