1 Timoteo 3:4-6

4 que gobierne bien su propia casa y mantenga sumisos a sus hijos con toda dignidad;

5 pues si alguno no es capaz de gobernar su propia casa, ¿cómo podrá cuidar de la Iglesia de Di-s?

6 Que no sea neófito, no sea que, llevado por la soberbia, caiga en la misma condenación del Diablo.