Marcos 1:44-46

44 "Mira, no lo digas a nadie, sino ve, muéstrate al sacerdote, y ofrece por tu limpieza lo que Moisés mandó, para testimonio a ellos".

45 Pero él, apenas salió, empezó a pregonar a voces y a divulgar el hecho. Como resultado, Jesús ya no podía entrar libremente en ninguna ciudad, sino que se quedaba en lugares solitarios. Y acudían a él de todas partes.*